Remolinos de fuego se producen a menudo, durante los incendios de matorrales. Son columnas verticales de fuego rotando. Solo se forman cuando las corrientes de aire y la temperatura son las adecuadas, creando un efecto similar a un tornado. Pueden ser tan altos como 30 a 200 pies y de ancho hasta 10 pies pero sólo duran unos pocos minutos, aunque algunas pueden durar más tiempo si los vientos son fuertes.