Aunque es un fenómeno bien conocido, la lluvia no acuosa rara vez se reporta o es documentado, pero cuando ocurre se vuelve una noticia de primera plana los medios, aunque con tintes apocalípticos.
Una lluvia de ranas en Wiltshire, Inglaterra se hizo los titulares en 1939, al igual que una tormenta de carbón en 1983, cuando un número de navegantes en Dorset conto historias de trozos de carbón que caen del cielo. Pero uno de los acontecimientos más extraños es una lluvia recurrente de peces que se ocurre entre los meses de mayo y julio en el Departamento de Yoro, Honduras.
Ahora se lo llama el Festival de la Lluvia de Peces. En la lluvia de Festival del Pescado, el pueblo de Yoro celebrar la oferta de pescado gratis todos los años.
Generalmente se piensa que los animales (o minerales) son absorbidos por las corrientes ascendentes de gran alcance durante una tormenta y luego escupipirlos con fuertes lluvias, aunque los meteorólogos siguen investigando el fenómeno.
