El 16 de agosto de 1960, Joseph Kittinger realizó su último salto desde el Excelsior III a 31.300 m (102.800 pies). Durante una caída libre de 4 minutos y 36 segundos alcanzó una velocidad máxima de 988 km/h antes de abrir su paracaídas a 5.500 m de altitud.
La presurización de su guante derecho falló durante el ascenso, lo que le provocó una hinchazón. Kittinger consiguió los récords de mayor ascenso en globo, salto en paracaídas de mayor altitud, caída libre más larga y mayor velocidad de un hombre en la atmósfera.
Por los saltos, Kittinger recibió una condecoración de Hoja de Roble a su Cruz de Vuelo Distinguido y el premio Harmon Trophy por parte del presidente Eisenhower.