El fenómeno del niño – oscilación del sur.

Se conoció con el nombre de El Niño a la aparición de aguas oceánicas cálidas en las costas del Océano Pacífico de América del Sur, durante el verano del hemisferio sur. La aparición de estas aguas cálidas fue identificada por los pescadores peruanos siglos atrás, quienes le dieron el nombre de El Niño, en alusión al niño Jesús, porque se observaba a finales de diciembre, cerca de Navidad. En la actualidad se llama fenómeno de El Niño al calentamiento de las aguas que se inicia en el Océano Pacífico Tropical occidental, cerca de Australia e Indonesia, donde la temperatura de las aguas superficiales se eleva unos cuantos grados por encima de lo normal. Gradualmente este máximo de temperatura se desplaza hacia el Este y alrededor de seis meses después, llega a la costa de América del Sur. El desplazamiento del máximo va acompañado de un enfriamiento relativo en el Pacífico tropical nor-occidental, cerca de Indonesia. Este fenómeno de ocurrencia irregular, se produce a intervalos de tres a ocho años, con una duración también irregular que varía de doce a dieciocho meses o mas. Cuando se produce el proceso opuesto, es decir la temperatura de la superficie del mar en el océano Pacífico tropical disminuye a valores menores que lo normal, se la da el nombre de fenómeno de La Niña. En la figura 12.4 se ilustran las condiciones normales del sistema océano – atmósfera y las condiciones durante el Niño.

Mientras esto sucede en el océano, en la atmósfera se produce una alteración en la presión atmosférica, que baja en el lado este del Pacífico sur y sube en el oeste (figura 12.4). A este vaivén de presión se le llama Oscilación del Sur (OS). Esto forma un sistema acoplado océano – atmósfera que se llama El Niño - Oscilación del Sur, ENOS (o ENSO en inglés), denotando con ello al conjunto de alteraciones en los patrones normales de circulación del océano y la atmósfera. Durante la fase negativa (positiva) de la OS la presión es relativamente más baja (alta) en el Pacífico suroriental, en torno al dominio del anticiclón del Pacífico Sur. Cuando las anomalías en la fase negativa (positiva) alcanzan valores significativos, debilitándose (fortaleciéndose) el Anticiclón del Pacífico Sur, el comportamiento de las variables atmosféricas y oceánicas muestran las características típicas de un evento el Niño (la Niña).

Se producen también alteraciones en los vientos alisios, que se debilitan cuando se produce el Niño, e incluso pueden llegar a invertir su dirección en el caso de eventos intensos. Por efecto del arrastre de los vientos alisios, el nivel del mar del sector occidental del Pacífico tropical es mayor que en la costa de Sudamérica, pero cuando estos se debilitan durante el Niño, el nivel del mar tiende a retomar su valor normal, produciéndose la nivelación de las aguas desde el sector de indonesia hacia Sudamérica. Por el contrario, durante la Niña los vientos alisios refuerzan su intensidad.

Figura 4 Comportamiento del sistema océano – atmósfera en condiciones

normales (superior) y durante el Niño (inferior).

Durante el ENSO se altera la presión atmosférica en zonas del planeta muy distantes entre sí, se producen cambios en la dirección y velocidad del viento y se desplazan meridionalmente las zonas de lluvia convectivas de la región tropical. En el océano, la rama de la corriente de Humboldt hacia el oeste se debilita (figura 12.4), favoreciendo el transporte de aguas cálidas hacia la costa de América del Sur. Los cambios en la temperatura del mar influyen en la salinidad y el oxígeno de las aguas, alterándose, por tanto, las condiciones ambientales para los ecosistemas marinos. Estos cambios, a su vez, afectan las poblaciones de peces, especialmente en las áreas del Pacífico Sudamericano y, por ende, la actividad pesquera en ellas. Por otra parte, los cambios en la circulación atmosférica alteran el clima global, con lo que se afectan la agricultura, los recursos hídricos y otras actividades económicas importantes en extensas áreas del planeta.

Teniendo en cuenta las anomalías anteriores, el análisis de las observaciones de la temperatura superficial del mar, de la actividad convectiva en la ZCIT, de la presión atmosférica, de los vientos alisios y del nivel del mar, realizadas en sectores determinados del océano Pacífico tropical, conocidas como regiones de Niño 1, Niño 2, Niño 3, Niño 4 y Niño 3.4, que se muestran en la figura 12.5, se usan como indicadores para monitorear el comportamiento del ENSO. En este mapa, las estaciones indicadas de norte a sur son Tumaco (TCO, Colombia), La Libertad (LLS, Ecuador), Talara (TAL, Perú), Callao (CAL, Perú), Arica (ARI, Chile), Caldera (CDA, Chile) e Isla de Pascua (PAS, Chile).

Figura 5 Regiones de monitoreo de El Niño.